La consistencia en la disonancia cognitiva

De acuerdo con Ovejero (1993), el individuo procura logar la consistencia dentro de sí mismo, sus opiniones y actitudes sueles existir en grupos que son interiormente consistentes. En el mismo sentido se debe de dar una consistencia entre lo que una persona sabe o cree y lo que hace. Generalmente tratamos de racionalizar estas inconsistencias pero cuando esto no sucede y dejamos que la inconsistencia siga existiendo se presenta una incomodidad psicológica.

Es en este punto donde relaciono los conceptos de Nietzsche que se proponen en el foro con la idea de disonancia cognitiva que expuso L. Festinger en 1957: una tensión entre creencias o actitudes incompatibles busca ser mitigada reduciendo la inconsistencia—ya sea cambiando alguna cognición, añadiendo cogniciones, o reduciendo la importancia de la cognición en su comportamiento.

En lo personal puedo poner de ejemplo la alimentación que llevo: por un lado me gusta mucho la comida que tiene muchas calorías pero al mismo tiempo quisiera llevar una dieta más sana, lo que me causa conflicto ya que regularmente la comida que sabe bien es la que más engorda. De lo anterior puedo identificar dos motivaciones que entran en inconsistencia: la primera es comer algo que me guste y la segunda sería alimentarme sanamente.


Referencia:

Ovejero, A. (1993). La Teoría de la Disonancia Cognitiva. Psicotema. Recuperado el 21 de febrero de 2014 del sitio: http://www.psicothema.com/pdf/873.pdf

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