Análisis de los Personajes de la Película Melinda y Melinda de Woody Allen
Introducción.
Allport categorizaba los rasgos como cardinales, centrales o secundarios, dependiendo de qué tan extensamente influyen en la personalidad. Los más penetrantes son los rasgos cardinales, los menos penetrantes son los rasgos secundarios. Los términos usuales que se emplean para describir a alguien están al rango intermedio: los rasgos centrales
.
Conninger (2003) nos indica que los rasgos específicos varían de una persona a otra. Una característica, que es un rasgo central para una persona puede o no ser siquiera relevante para otra. Por ejemplo, no es el rasgo de autoconfianza lo que lo hace central sino más bien el hecho de que muchas conductas son afectadas por él.
Los rasgos secundarios describen formas en las que una persona es consistente, pero, a diferencia de un rasgo central, no afectan tanto lo que hace la persona. Los rasgos secundarios son menos llamativos, menos generalizados, menos consistentes y es menos común que entren en acción que los rasgos centrales. Para algunas personas una preferencia personal puede ser un rasgo central e incluso en algunos casos puede llegar a ser un rasgo cardinal.
Un rasgo cardinal es tan importante que domina casi todo lo que hace una persona. Clonninger (2003) dice que es el rasgo eminente, la pasión dominante, el sentimiento maestro o la raíz de una vida.
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Desarrollo.
La película dirigida por Woody Allen trata sobre unos escritores e intelectuales que debaten sobre las características que debe tener una buena historia, por lo que, para exponer su punto, desarrollan dos historias paralelas, las cuales van criticando durante la construcción de la trama y de las características personales de sus protagonistas.
Personajes principales:
Melinda Robicheaux. Personaje central de las dos historias que muestran distintos contextos y finales.
Rasgo cardinal: Desubicada
Rasgos centrales: Nerviosa, ansiosa, depresiva, complicada, insegura, baja autoestima, depresiva.
Rasgos secundarios: Desesperada, problemática, desesperanzada, suicida, ensimismada, romántica, indecisa, adicta a los medicamentos, distraída.
Laurel. Esposa central de la primera historia. Es maestra de música.
Rasgo cardinal: Inocente
Rasgos centrales: Calmada, consumista, buena amiga, fiel, modesta.
Rasgos secundarios: pesimista, apresurada, experimentadora, sincera, activa.
Lee. De profesión actor, esposo de Laurel, personaje protagónico de la primera historia. Se le muestra como un hombre cansado de su relación y por lo tanto bastante adúltero.
Rasgo cardinal: Egocéntrico
Rasgos centrales: Positivo, proactivo, atleta, asertivo, adúltero, extrovertido.
Rasgos secundarios: Egoísta, pasional.
Susan. Esposa central de la segunda historia. Es una directora de cine con carácter controlador.
Rasgo cardinal: Controladora
Rasgos centrales: Atractiva, egocéntrica, fría, concentrada, enfocada, materialista.
Rasgos secundarios: Pretenciosa, adúltera, desapegada.
Hobie. Esposo central de la primera historia. Está casado con la directora de cine, en su relación asume un papel similar al de una ama de casa.
Rasgo cardinal: Cooperativo
Rasgos centrales: Sumiso, aprensivo, sincero, preocupón, iluso, comprensivo, abierto.
Rasgos secundarios: Servicial, bondadoso, sensible, expresivo, sufre de ataques de pánico.
Conclusiones.
La película Melinda y Melinda dirigida por el cineasta Woody Allen, cuya vasta obra cinematográfica se distingue por explotar los rasgos de personalidad de sus personajes; nos muestra un gran espectro de características distintivas de los individuos que integran la trama.
Gracias a esa riqueza en los rasgos tan diversos de personalidad de los protagonistas y secundarios, es posible realizar un análisis utilizando los conceptos expresados por Allport en sus aportaciones al conocimiento de la personalidad humana.
Los rasgos cardinales, centrales y secundarios no son tres tipos discretos, en realidad, los rasgos aparecen en un continuo de penetración. Para Allport, esos diversos rasgos existen en un espectro más amplio de aspectos de la personalidad, el cual incluye influencias mucho menos penetrantes (reflejos y hábitos) y niveles de integración de orden superior. La personalidad está integrada en una estructura jerárquica. Los rasgos ayudan a satisfacer los anhelos orgánicos que son el único motivo original que da fuerza a la actividad.
Allport expone que estos anhelos se originaban en el sistema nervioso vegetativo, el cual es más primitivo y esencial que el sistema nervioso central, el cual es principalmente un medio de ajuste. El sistema vegetativo es el maestro, el cerebro - espinal es el sirviente, el primero impele al ajuste, el último realiza el ajuste.
Referencia:
Cloninger, S. (2003). Teorías de la Personalidad. Prentice Hall, Pearson Educación. Recuperado el 10 de mayo de 2015 del sitio ULA Biblioteca Virtual.
Conninger (2003) nos indica que los rasgos específicos varían de una persona a otra. Una característica, que es un rasgo central para una persona puede o no ser siquiera relevante para otra. Por ejemplo, no es el rasgo de autoconfianza lo que lo hace central sino más bien el hecho de que muchas conductas son afectadas por él.
Los rasgos secundarios describen formas en las que una persona es consistente, pero, a diferencia de un rasgo central, no afectan tanto lo que hace la persona. Los rasgos secundarios son menos llamativos, menos generalizados, menos consistentes y es menos común que entren en acción que los rasgos centrales. Para algunas personas una preferencia personal puede ser un rasgo central e incluso en algunos casos puede llegar a ser un rasgo cardinal.
Un rasgo cardinal es tan importante que domina casi todo lo que hace una persona. Clonninger (2003) dice que es el rasgo eminente, la pasión dominante, el sentimiento maestro o la raíz de una vida.
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Desarrollo.
La película dirigida por Woody Allen trata sobre unos escritores e intelectuales que debaten sobre las características que debe tener una buena historia, por lo que, para exponer su punto, desarrollan dos historias paralelas, las cuales van criticando durante la construcción de la trama y de las características personales de sus protagonistas.
Personajes principales:
Melinda Robicheaux. Personaje central de las dos historias que muestran distintos contextos y finales.
Rasgo cardinal: Desubicada
Rasgos centrales: Nerviosa, ansiosa, depresiva, complicada, insegura, baja autoestima, depresiva.
Rasgos secundarios: Desesperada, problemática, desesperanzada, suicida, ensimismada, romántica, indecisa, adicta a los medicamentos, distraída.
Laurel. Esposa central de la primera historia. Es maestra de música.
Rasgo cardinal: Inocente
Rasgos centrales: Calmada, consumista, buena amiga, fiel, modesta.
Rasgos secundarios: pesimista, apresurada, experimentadora, sincera, activa.
Lee. De profesión actor, esposo de Laurel, personaje protagónico de la primera historia. Se le muestra como un hombre cansado de su relación y por lo tanto bastante adúltero.
Rasgo cardinal: Egocéntrico
Rasgos centrales: Positivo, proactivo, atleta, asertivo, adúltero, extrovertido.
Rasgos secundarios: Egoísta, pasional.
Susan. Esposa central de la segunda historia. Es una directora de cine con carácter controlador.
Rasgo cardinal: Controladora
Rasgos centrales: Atractiva, egocéntrica, fría, concentrada, enfocada, materialista.
Rasgos secundarios: Pretenciosa, adúltera, desapegada.
Hobie. Esposo central de la primera historia. Está casado con la directora de cine, en su relación asume un papel similar al de una ama de casa.
Rasgo cardinal: Cooperativo
Rasgos centrales: Sumiso, aprensivo, sincero, preocupón, iluso, comprensivo, abierto.
Rasgos secundarios: Servicial, bondadoso, sensible, expresivo, sufre de ataques de pánico.
Conclusiones.
La película Melinda y Melinda dirigida por el cineasta Woody Allen, cuya vasta obra cinematográfica se distingue por explotar los rasgos de personalidad de sus personajes; nos muestra un gran espectro de características distintivas de los individuos que integran la trama.
Gracias a esa riqueza en los rasgos tan diversos de personalidad de los protagonistas y secundarios, es posible realizar un análisis utilizando los conceptos expresados por Allport en sus aportaciones al conocimiento de la personalidad humana.
Los rasgos cardinales, centrales y secundarios no son tres tipos discretos, en realidad, los rasgos aparecen en un continuo de penetración. Para Allport, esos diversos rasgos existen en un espectro más amplio de aspectos de la personalidad, el cual incluye influencias mucho menos penetrantes (reflejos y hábitos) y niveles de integración de orden superior. La personalidad está integrada en una estructura jerárquica. Los rasgos ayudan a satisfacer los anhelos orgánicos que son el único motivo original que da fuerza a la actividad.
Allport expone que estos anhelos se originaban en el sistema nervioso vegetativo, el cual es más primitivo y esencial que el sistema nervioso central, el cual es principalmente un medio de ajuste. El sistema vegetativo es el maestro, el cerebro - espinal es el sirviente, el primero impele al ajuste, el último realiza el ajuste.
Referencia:
Cloninger, S. (2003). Teorías de la Personalidad. Prentice Hall, Pearson Educación. Recuperado el 10 de mayo de 2015 del sitio ULA Biblioteca Virtual.
