La teoría de la conducta operante de Skinner y las diversas personalidades y compatibilidad en un equipo de trabajo.

Introducción.  La visión del trabajo en equipo es   De acuerdo con Cloninger (2003), el conductismo ha sido uno de los enfoques más importantes de la psicología moderna. El conductismo radical insiste en que sólo debería incluirse a las conductas observables en una teoría científica. B. F. Skinner es el conductista radical más famoso de los últimos tiempos. Al inicio del siglo XX, John B. Watson propuso que la personalidad se determina por el ambiente.   Watson menospreciaba los talentos, inclinaciones, tendencias y habilidades de los individuos, ya que consideraba que la experiencia podía superar el efecto de la dotación genética o personalidad, a la cual definió en términos de conducta.   El enfoque conductual hace suposiciones distintivas acerca de la personalidad:   1.- La personalidad se define en términos de conducta. Lo que una persona hace constituye su personalidad.  2.- La conducta se determina por factores externos en el ambiente, específicamente los reforzamientos y los estímulos discriminativos.  3.- El conductismo afirma que es posible influir en la gente para que mejore, cambiando las condiciones ambientales, incluidos cambios sociales.  4.- El conductismo asevera que el cambio puede ocurrir a lo largo de la vida de una persona.  5.- El conductismo estudia a la persona individual. No supone que los factores que influyen en una persona necesariamente tendrán influencias similares en alguien más.  

  Desarrollo  En esta ocasión se estudian las personalidades de cada uno de los miembros del equipo en base al enfoque propuesto por la teoría conductista, para de esta forma, obtener una explicación de los fenómenos, dinámicas e interacciones observadas durante el trabajo en equipo y también para encontrar la forma de trabajar más eficientemente, así como para resolver las diferencias y dificultades satisfactoriamente.  Este enfoque se centra en predecir y controlar la conducta manifiesta y observable. Dicha conducta puede ser registrada confiablemente por observadores independientes, quienes pueden estimarla o medirla de otra forma. Además, afirma que las causas de la conducta son externas al individuo. En contraste, la teoría de la personalidad tradicionalmente ha buscado las causas dentro de las personas: rasgos, necesidades, etc. Skinner argumentaba que es ilógico considerar que los rasgos de la personalidad (como la extroversión) o los motivos internos (como la autorrealización y la ansiedad) puedan ser las causas de la conducta.   Para la realización del presente trabajo en equipo, decidimos utilizar un enfoque conductual menos estricto que el de Skinner,  por lo que estudiaremos las siguientes características que  influyen a nuestra conducta y por tanto, nuestro desenvolvimiento y desempeño en el equipo. 

 Repertorio conductual básico (experiencias intensivas de aprendizaje), el cual comprende:   

Lenguaje-cognoscitivo.  

Hablar, leer, pensar, planear, interacción social.    

Emocional-motivacional.  

Respuestas al castigo y a las recompensas, respuestas emocionales a las interacciones con los demás miembros del equipo. Disfrutar del trabajo y la recreación. Depresión, Ansiedad.    

Sensomotor.  

Escribir, Conducta agresiva, conducta activa-pasiva, destrezas sociales.  

Cuadro de repertorio conductual básico. 

 Para solicitar el cuadro correspondiente escribir un mail a : gmex@live.com

Consideraciones sobre el cuadro anterior. 

Es importante destacar que, con excepción de Arianne, hemos trabajado juntos en equipo prácticamente desde el inicio de la carrera, por lo que contamos con un buen conocimiento de las capacidades y las áreas de oportunidad de cada uno de los miembros que lo integran. 

Otro hecho que consideramos importante para el adecuado funcionamiento del equipo ha sido la diversidad de sus miembros, la capacidad para escuchar a los compañeros y las ganas por sacar adelante las tareas más allá de las diferencias que pudieran darse. Lo anterior lo atribuimos a las experiencias, tanto positivas como negativas, que hemos vivido en el transcurso de nuestra vida personal y laboral. 

Arianne nos permite tener una visión diferente de los planteamientos, con la finalidad de obtener soluciones creativas y diferentes; Emmanuel nos aporta las bases teóricas sobre las cuales ponernos a trabajar ya que, como se comentó anteriormente, generalmente estudia los materiales que forman parte de la plataforma virtual. Iván nos ha ayudado a no perder de vista los objetivos y a no pasarnos de las fechas de entrega, mientras que Daniel siempre ha aportado la información necesaria para la satisfactoria realización de las actividades y generalmente participa en la captura del texto correspondiente. 

  Conclusiones   De acuerdo con Cloninger (2003) el conductismo supone que las acciones de la gente son determinadas por factores externos, no por las fuerzas al interior del individuo. Esta suposición de determinismo ha dado lugar a un antiguo debate entre los conductistas, en particular B. F. Skinner, y los humanistas, quienes afirman que la gente es libre para decidir sus acciones.   Skinner declaraba que el conductismo representa una revolución científica contra las concepciones anteriores, que buscaban las causas de la conducta dentro del individuo; de igual forma contiene temas que son parte más general del pensamiento moderno: los problemas pueden resolverse por medio de la tecnología, la razón prevalece sobre la emoción, la moralidad es relativa más que absoluta, y el mundo puede ser mejorado.  La teoría de la conducta operante de Skinner se ha aplicado ampliamente, en particular en la terapia y en la educación, para diseñar estrategias que incrementen la conducta deseable y disminuyan la conducta problemática. La terapia conductual ofrece un tratamiento eficaz para una variedad de problemas, pero se ha cuestionado su eficacia en pacientes neuróticos.   La modificación de la conducta es el enfoque terapéutico que aplica sistemáticamente los principios del aprendizaje para cambiar la conducta. El primer paso es hacer un análisis funcional de la conducta que va a modificarse. Es decir, se identifican con cuidado los estímulos y reforzamientos que influyen en la conducta. Un análisis funcional más completo permite una mejor comprensión de la conducta problema y por tanto mayor oportunidad de controlarla sin usar reforzamientos o castigos excesivamente poderosos o artificiales. En segundo término se plantea la intervención, si la conducta ocurre en algunas situaciones pero no en otras, puede ser posible cambiar la conducta controlando la situación. A menudo la conducta deseable se fortalece agregando reforzamiento y la conducta indeseable disminuye reteniendo el reforzamiento o, de ser necesario, por medio del castigo.   Las técnicas de modificación de la conducta han sido aplicadas a una gama sorprendente de conductas, incluidos higiene oral, entrenamiento de destrezas sociales, control de peso, manejo del aula y enseñanza, administración de organizaciones, control del dolor e incluso la creatividad. 

Referencia: 

Cloninger, S. (2003). Teorías de la Personalidad. Prentice Hall, Pearson Educación. Recuperado el 15 de mayo de 2015 del sitio ULA Biblioteca Virtual.