Qué NO deben ser los Primeros Auxilios Psicológicos. PAPs

Es importante que toda persona que tenga los conocimientos necesarios para brindar los primeros auxilios psicológicos sepa muy bien lo que NO deben ser o lo que no se deben considerar:


NO son una terapia

NO son una forma de diagnóstico

Ni siquiera son una Técnica de Desactivación (los conocidos Defusing y Debriefing).

Los Primeros Auxilios Psicológicos no deben de ser jamás una forma de abordar muy en produndidad y con muchas verbalizaciones lo que ha ocurrido, eso, que es muy útil y muy necesario quedará siempre para etapas posteriores  a las primeras 72 horas que han transcurrido después del acontecimiento impactante.

Las personas a las que se proveen los PAPs están en una situación de alta vulnerabilidad, acaban de vivir una pérdida, un accidente, quizá varias pérdidas, están sufriendo, están de alguna manera tratando de ajustar lo que acaba de ocurrir a lo que ellos tenían previsto, lo que pensaban que iba a ser su vida; y normalmente esta es una situación de altísima dificultad y en la mayoría de las veces de mucho sufrimiento. En ese contexto, debemos de ser especialmente honestos y confiables, es decir, no debemos de hacer promesas que luego no podremos cumplir. A veces llevados por la compasión, por la empatía, nos gustaría poder solventar para estas personas cosas que no están en nuestras manos. Si lo prometemos en un momento de vulnerabilidad y luego no mantenemos la palabra, les haremos más daño que si honestamente les decimos con claridad la realidad de la situación y la capacidad humana, material o tecnológica existente para afrontarla.

También es muy importante tratar de preservar la privacidad y dignidad de las personas afectadas, en especial cuando son acontecimientos masivos en los que generalmente concurren medios de comunicación, que al tratar de hacer su labor, intentan conocer detalles e informaciones que vulneran el derecho a la confidencialidad de las personas afectadas. Es obligación de los involucrados en los PAPs preservar la privacidad de los individuos a los cuales están atendiendo.

Cuando aplicamos PAPs a una comunidad o incluso a un grupo más reducido, podemos encontrarnos con amplio espectro de culturas, personalidades, maneras de pensar, maneras de ver el mundo, religiones, etc; la persona que está brindando los PAPs debe ser especialmente sensible a esa diversidad, debe de acomodar su vestimenta, su lenguaje, su forma de ser, incluso su enfoque, a esa diversidad de las personas afectadas.